Charcos y barro,
pan con chocolate,
madres de guata y rulos.
tiempos en los que el garbanzo negro
aun no está acreditado.
Caen lluvias, hojas y años
quiebran las ansias
caen lagrimas
las dudas se agrandan,
las voluntades amainan.
(Hasta el sombrero acaba perdiendo el ala).
Soslayadas miradas brindan
con la sombra de lo que fuimos
por estos despojos que quedan.
(último tesoro que guarda el espejo).
El tiempo, laborioso verdugo,
ha marcado ya su golpe definitivo,ejecutará la sentencia dictada por el hado
sin aguardar más venganza
que la del olvido.
(Olvidar es el único oficio pendiente
del árbol caído).
Detrás, solo queda sombra,
donde nada se refleja,
último aliento cercano al beso
que nada esconde.
Hasta la soledad pierde su nombre.
si nadie la nombra.
Detrás de la sombra,
no hay espejos,
ni dudas.
............
Tampoco hay más sombras.
Detrás de la sombra,
no hay espejos,
ni dudas.
............
Tampoco hay más sombras.
Hay que huir al Sur. Buscar la sombra, la del Sol.
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