De tierra adentro hasta el mar,
es pronto para la amnesia
de la luna de invierno al sol de verano,
es tarde para irnos sin heridas.
Lo intenté.
Desde la caricia encendida de mi mano
al latido que te nombra en mi pecho.
¿Qué tengo que hacer?
Ahora que todo está hablado,
va el amor a posarse
en las ramas secas
de ese árbol que plantamos.
Va dictando su ley
su derecho y su condena.
Es pronto para olvidar.
Tu recuerdo vuela tras de mí,
como sombra que bate sus alas
negando su caricia y su canto
¿Que hay que hacer?
Cruzaré desde oriente a occidente
en este cuerpo pasajero
guarida de un espíritu nómada.
en busca de un consuelo.
Es pronto para el consuelo,
Buscaré la compañía más generosa,
de la inmensa soledad.
Buscaré tu sombra en el llano
sin sonidos
sin rumores
sin nubes de colores
ni rocío de esperanzas.
Rendido a tus pactos,
dejaré que resbalen los años.
Lo intenté,
¿Qué hay que hacer?