sábado, 6 de noviembre de 2010

La cometa


Pendiente de un hilo

sobrevuela el cementerio

la cometa roja y blanca

en la mano tierna de un niño.



Un tirón, una sonrisa,

¡pájaro!, ¡ vuela libre!, ¡se feliz!.



El árbol también mira hacia arriba,

preso en su quietud envidiosa

enredado con el viento y con el suelo

quiere bailar el aire

quiere ser cometa.



Un enganchón

para romper su inocencia...



Bajo el suelo, brotando la muerte.

Y una plegaria se eleva a lo alto.



El niño sobre la muerte,

el hilo sobre la mano

la cometa sobre el cielo,

el árbol anclado al suelo.



Todos juegan, viento, cometa, árbol, niño y muerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por sus comentarios.